ODS
Los Objetivos de desarrollo sostenible son el plan maestro para conseguir un futuro sostenible para todos. Se interrelacionan entre sí e incorporan los desafíos globales a los que nos enfrentamos día a día, como la pobreza, la desigualdad, el clima, la degradación ambiental, la prosperidad, la paz y la justicia. Para no dejar a nadie atrás, es importante que logremos cumplir con cada uno de estos objetivos para 2030.
Para lograr este Objetivo de acabar con la pobreza, el crecimiento económico debe ser inclusivo, con el fin de crear empleos sostenibles y de promover la igualdad.
El sector alimentario y el sector agrícola ofrecen soluciones claves para el desarrollo y son vitales para la eliminación del hambre y la pobreza.
La educación es la base para mejorar nuestra vida y el desarrollo sostenible.
La igualdad entre los géneros no es solo un derecho humano fundamental, sino la base necesaria para conseguir un mundo pacífico, próspero y sostenible.
Debemos reflexionar sobre este progreso lento y desigual, y revisar nuestras políticas económicas y sociales destinadas a erradicar la pobreza.
Reducir la desigualdad en y entre los países.
El objetivo del consumo y la producción sostenibles es hacer más y mejores cosas con menos recursos.
El cambio climático es un reto global que no respeta las fronteras nacionales.
Acceso universal a la justicia y la construcción de instituciones responsables y eficaces a todos los niveles.
Revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible.